Cómo se consigue

Puntos claves en la construcción Passivhaus

1 Aislamiento 2 Hermeticidad 3 Ausencia de puentes térmicos 4 Ventanas 5 Ventilación mecánica con recuperación de calor

AISLAMIENTO

Uno de los elementos imprescindibles en la construcción Passivhaus es el Aislamiento Térmico en paredes exteriores, cubierta y suelo, para recudir al mínimo la transmisión térmica del interior al exterior, y viceversa.

El aislamiento utilizado puede ser más de 6 veces superior al que exige el código técnico actual, pudiendo incluso resultar «disparatado» para quienes todavía no conocen los requisitos de esta rigurosa forma de construir.

Aún así, de nada serviría pensar sólo en aislamiento. Esta es una condición necesaria, pero hace falta mucho más, en Córdoba o en cualquier otro lugar.

El aislamiento térmico se completa con el aislamiento acústico. En ambos no sólo es importante el cálculo previo y el tipo de materiales empleados, sino también la forma de colocarlos.

HERMETICIDAD

Se trata de una capa estanca completamente hermética, que hace que no haya infiltraciones de aire. No es el aislamiento del que hemos hablado anteriormente, se trata de una «capa» aparte o añadida que no se usa en la construcción convencional.

Además de los elementos constructivos comunes, hablamos de otros tan característicos en este tipo de construcción como sorprendentes, como las lonas diseñadas para tal uso que son colocadas en el interior y exterior de los muros que dan al exterior.

Otro de los elementos más llamativos en este punto son las cintas de sellado. Se trata de cintas especiales utilizadas en la construcción Passivhaus. Se usan para sellar absolutamente todas las juntas, ventanas, canalizaciones que salen al exterior como acometidas de agua, luz, …Se sella absolutamente todo.

Por esta cámara o capa estanca independiente discurren las instalaciones eléctricas, fontanería, etc. No hay rozas.

En una construcción convencional, las corrientes de aire que se pueden dar a través de ventanas, huecos o grietas provocan incomodidad en el usuario y hasta condensaciones interiores, particularmente durante los períodos más fríos del año.

En un edificio Passivhaus, la envolvente es lo más hermética posible. Esto se logra cuidando al máximo la ejecución de las juntas durante la construcción.

La hermeticidad del edificio se mide con una prueba de presión, o ensayo Blower Door, los valores que debe arrojar tal prueba son realmente exigentes.

Una vez más, de poco sirven el uso de estos materiales, si no se colocan con la máxima precisión y cuidado.

AUSENCIA DE PUENTES TÉRMICOS

¿A qué llamamos puentes térmicos? Se trata de elementos de la envolvente de un edificio que ayudan a que la temperatura del interior de la vivienda escape fuera y la temperatura de la calle alcance con mayor facilidad el interior. En otras palabras, funcionan como ventanas abiertas a la calle.

Ejemplos de puente térmico son las cornisas de hormigón que tienen vuelo, balcones volados, juntas entre elementos constructivos, ventanas, etc.

El control exhaustivo de los puentes térmicos y su neutralización total son una condición necesaria en la edificación Passivhaus.

Para analizar las condiciones térmicas de una vivienda se llevan a cabo mediciones térmicas que arrojan información del todo fiable sobre cuáles son estos puntos críticos o puentes térmicos.

VENTANAS

Los huecos son el “punto débil” de la envolvente, por lo que se debe poner mucha atención en su ubicación durante el diseño del proyecto, y en su correcta colocación durante la obra.

La colocación de las ventanas es tan importante como la calidad de éstas. Muchas veces no son necesarias las mejores ventanas, depende de las condiciones climatológicas. Sin embargo la colocación debe ser impecable. Aquí también se colocan cintas de sellado, para evitar que éstas actúen como puente térmico.

Ventana para aislamiento térmico

VENTILACIÓN MECÁNICA CON RECUPERACIÓN DE CALOR

¿Cómo compensamos la hermeticidad? Con un sistema de ventilación, que precalienta el aire limpio entrante antes de expulsar el aire viciado.

La cantidad de energía necesaria para acondicionar los espacios es tan pequeña que la podríamos cubrir con una pequeña estufa sin necesidad de un sistema convencional de radiadores o suelo radiante, con el correspondiente ahorro económico que ello supone.